Con una concisa y clara exposición, Óscar Prieto, Sociólogo de la Universidad Santo Tomás, Especialista en Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de la Universidad Externado de Colombia, señaló los desafíos del posacuerdo en materia de desarrollo territorial.
Por: Gustavo Patiño
- La administración de las concesiones y licencias para la explotación mineroenergética. Debemos poner especial atención a esta situación ya que “hoy la Registraduría dijo que no tiene más plata para consultas populares y desde el Ministerio de Medioambiente hay un ejercicio e intento de desconocer los resultados de éstas”.
- Fortalecimiento de las autoridades ambientales. El control del territorio “no es un problema solo de seguridad, no se soluciona con fuerza pública, sino que toda la institucionalidad del Estado tiene que garantizar que tiene total control territorial en las zonas que abandonaron las Farc y el tema ambiental es prioritario”.
- “El catastro multipropósito establecido en el punto uno del acuerdo debe favorecer el ordenamiento productivo en torno a la sostenibilidad ambiental del país. En este catastro se está planteando que se debe revisar cuántos predios, con qué extensiones y qué capacidad tiene el país, lo que nos debe permitir reordenar el territorio en términos de producción agropecuaria”.
- “La paz debe facilitarnos la apertura de nuevos nichos de mercado que beneficien la conservación ambiental, incluyendo a los campesinos en planes que les permitan permanecer en los territorios y ser agentes de conservación del medioambiente”.
- “Es necesario que la implementación del acuerdo de paz garantice que se creen y se vinculen en el ordenamiento territorial colombiano la figura del campesino como un sujeto de derechos, pues este es inexistente en la constitución, incluso, el censo agrario del 2014 no incluye la categoría de campesino, se está hablando de trabajador agropecuario y esto inclusive le niega su propiedad sobre la tierra”.