Por: Juan Sebastián Arias Palomá.
“Los corridos son recordatorios, souvenires que reviven hechos puntuales de una sociedad”.
Luego de la Asamblea multiestamentaria de la Universidad Surcolombiana, declarándose en paro permanente indefinido a causa del déficit presupuestal de la educación pública en Colombia; dio inicio un conversatorio nutrido de mucha rítmica norteña, llanera y ranchera, denominados corridos prohibidos.
Conversatorio dirigido por Carlos Páramo, invitado por excelencia del Festival Cinexcusa en su versión 13°. Qué, a partir de la reproducción de corridos para el auditorio expectante, detalló cada composición en busca del relato que inmortalizó un suceso.
Páramo-antropólogo de la Universidad Nacional-acota que los corridos prohibidos encarnan la vida de la persona que vive en la frontera o de aquel personaje que se dedicó al mundo de la ilegalidad. Así, configura un sentido social, visibilizando a todos los actores que albergan una problemática en particular, tanto protagonistas como secundarios.
En Colombia-explica Páramo-los corridos relatan hazañas de guerrilleros liberales de la época como Guadalupe Salcedo o Dumar Aljure. Y, como precedente colombiano, el narcotráfico y la minería ilegal quedarían gravadas en cultos populares a personalidades oscuras para la historia de nuestro país. Como Pablo Escobar, Efraín González, Sangrenegra y José Gonzalo Rodríguez Gacha “El Mexicano” qué, particularmente, grababa su propia historia en corridos de antaño.
“Pensarse la vida como un corrido para entender la historia y no volver a repetirla”
Los corridos al enmarcar un suceso histórico determinado, se convierte en un juicio estético, mencionó una espectadora del evento. Qué, en efecto, Páramo validaría. Porque eficazmente el género trae a colación cada vez que se le repite, un discurso político socialmente excluido, pero que coloquialmente se acepta en el actuar diario de la población descrita.
Finalmente, mientras las luces del recinto perdían fuerza para enfocarse en la proyección de la cinta mexicana Miss Bala (exclusiva del Cinexcusa), Páramo concluye su intervención diciendo: “Los corridos no deben ser calificados como música basura, ya que, al igual que el reguetón, solo relatan y enmarcan la clase de sociedad violenta y sin escrúpulos en la cual cogió vida”.